Preguntas sin contestación sobre Zaqueo En La Biblia Lo que debe hacer comprender

zaqueo en la biblia

La Biblia, los evangelios, no son puros escritos históricos. Si de esta manera los ves tú y pretendes adivinar historias de los individuos de este libro que lees,… tu vas a ver… Yo creo que el fallo es increíble. Pues conozco mejores novelas que leer y de mejor discusión. Tu solo fundamentas que fue efectivo el acto de obsequiar y retribuir solo por el supuesto, yo no veo que eso este escrito en la biblia con lo que puedo suponer que ha podido no ser.

En los contenidos escritos bíblicos precedentes, se recalcaron ciertas expresiones o expresiones a forma de recalcar y sacar parte de lo que quiere Lucas que se le revele al lector en el espíritu. El relato hace ver que Jesús no iba exactamente a Jericó, solo pasaba. Pero allí había un hombre que sabía que Jesús iba a pasar y sentía en su corazón el verdadero deseo de comprender al Señor. Este deseo fue lo que logró que Jesús hiciese una parada en Jericó para entender al hombre que ansiaba no solo verlo sino asimismo conocerlo. Ese hombre era Zaqueo, quizás la persona menos indicada a fin de que Jesús quisiera llegar hasta él y menos aún sentarse sobre su mesa y cenar con él. —Señor, voy a dar a los pobres la mitad de todo cuanto tengo.

El Mensaje De Jesús

Señor, en mi oración a veces soy como Zaqueo, realizando grandes sacrificios para poder a divisarte, solo para darme cuenta de que me andas aguardando, llamándome por mi nombre, invitándote a ti a mi corazón. Una vez que estoy contigo, encuentro la alegría poniendo las cosas en su rincón, ordenando mi vida, encontrando las fuentes de generosidad y sabiduría que se han suprimido por causa de viejos hábitos. Jesús, en el momento en que me siento en el pc, tú me miras como miraste a Zaqueo. No me solicitudes cosas, pero en tu compañía deseo alterar algo en mí misma y ofrecértelo.

Este acto señala que con Dios todas y cada una de las cosas son probables, y que aun un hombre rico puede ser salvo por Dios y cambiar sus acciones. No solo conoció Zaqueo al Señor, sino ensayo el poder transformador del Hijo de Dios y ofreció dar la mitad de sus recursos a los pobres y devolver cuadruplicado lo que hubiera tomado de alguno (v. 8). Su empeño por hallar al Señor, aunado al enorme deseo de obedecer a Dios, logró que Zaqueo fuera poderoso en espíritu. Nos lo imaginamos caminando una mañana en la ciudad en el instante en que oyó a 2 hombres que charlaban del Señor Jesús. Decían que estaba en camino a Jericó y que ese día había sanado a un ciego. Le despertó curiosidad imaginarse que un hombre podría hacerse riquísimo con esos poderes.

Zaqueo

Son los ojos y la voz de Jesús los que devuelven la dignidad a Zaqueo. Al haber oído la palabra de Jesús y haber percibido su mirada, Zaqueo se pone parado y le reconoce como Señor. La clemencia de Jesús, transmutada en perdón, puso parado a Zaqueo. El recaudador de impuestos ha recibido la mirada del Señor, fué perdonado; ahora puede transformarse. Cobrar impuestos dejaba efectuar cualquier arbitrariedad, lo que repercutía en el rápido enriquecimiento del cobrador.

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La forma de vida de Zaqueo con relación a su pueblo era injustificable. En la temporada de Jesús las contribuciones gravaban muy poderosamente al pueblo judío. El sistema impositivo era intensísimo y, capilarmente, llegaba a todos los estratos de la población. Cobraban impuestos los romanos, pero también los cobraba el rey Herodes, y había que abonar -además de esto- un pequeño diezmo al Templo. Zaqueo supo ser un recaudador de impuestos de origen judío que como consecuencia de su labor no disfrutaba de la simpatía de su pueblo, sino muy por contra, y aún mucho más, su actividad lo había acercado mucho al pecado.

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mas en el momento en que es asombrado, paga siete ocasiones; debe prestar todos los recursos de su casa. Él NO dijo que si lo llevaban a juicio daría la mitad de sus recursos, no; mencionó que lo haría sin más ni más, que renunciaba ahora al Pecado que antes cometía. Y ahora mismo, este defraudador del pueblo, baja del árbol corriendo, para dejar que el Señor de la Gloria entre a su casa. Él era el jefe de los publicanos, de los recaudadores de impuestos, esto es gente judía que cobraba impuestos altos a su pueblo, a su nación para dárselos al Imperio De roma, y frecuentemente lo cobraba por la fuerza. Su amor nos antecede, su mirada se adelanta a nuestra necesidad. Él sabe ver más allá de las apariencias, alén del pecado, más allá del fracaso o de la indignidad.

Rendirse no iba según su personalidad, algo muy evidente en sus tácticas malignas para recaudar dinero de los que evadían el pago de impuestos. Y respecto a la procedencia mal habida de los recursos de Zaqueo es cierto, por eso con un corazón arrepentido, sincero, mencionó que le devolvería multiplicado A QUIEN HAYA DEFRAUDADO. Si esto lo tienes claro, tienes la opción de bien creértelo o no creértelo. Hugo, la Biblia lo quieras o no es PALABRA DE DIOS. No es una novela. A la Palabra de Dios, esto es, a la Biblia, ni le falta ni le sobra.

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El evangelio de Lucas tiene por objetivo estar comunicados la liberación que Jesús vino a otorgarnos a todos. Jesús es el Señor que libera, pero esa salvación que el Señor nos otorga la realiza desde la clemencia. La forma en la que Jesús se invitó a cenar a sí mismo cambió para toda la existencia la vida de Zaqueo el recaudador de impuestos, y también nosotros podemos alterar nuestra vida si respondemos como lo logró él. 7Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador.

Pero la presencia del Señor convirtió a Zaqueo en un hombre diferente. La vida Jesús es la encarnación del emprendimiento liberador de Dios entre los hombres. Jesús “tiene que” dejar en libertad al cobrador de impuestos por el hecho de que para esta misión fue enviado. El es el Hijo del Hombre que nos trae la liberación de Dios transformada en servicio, humildad y vida compartida.

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