mi amor en italiano Deuteronomio 9
CAPÍTULO 9
Deuteronomio 9: 1-25 [.45900. Moisés los disuade de la opinión de su propia justicia.
1. este día – significa en esta ocasión. Los israelitas habían llegado a los límites de la tierra prometida, pero se vieron obligados, para su enorme mortificación, a regresar. Pero en este momento precisamente debían ingresar. Ningún obstáculo podría evitar su posesión; ni las defensas fortificadas de las localidades, por la resistencia de los gigantescos pobladores de quienes habían recibido de los espías una descripción tan formidable.
localidades enormes y cercadas al cielo – Las localidades orientales por lo general cubren un espacio bastante más grande que las de Europa; porque las viviendas comunmente se resaltan con jardines y campos que intervienen. todos están rodeados de paredes construidas con ladrillos quemados o secados al sol, de unos 40 pies de altura. Todas las clases en el Este, pero fundamentalmente las tribus nómadas, en su ignorancia de la ingeniería y la artillería, habrían abandonado con desesperación la iniciativa de un asalto a una localidad amurallada, que hoy sería demolida en unas escasas horas.
4-6. No hables en tu corazón,. . . diciendo: Por mi justicia, el Señor me ha traído para poseer esta tierra – Moisés se protege fundamentalmente de asegurar a sus compatriotas contra la vanidad de sospechar que sus propios méritos les habían otorgado el privilegio distinguido. Los cananeos eran una raza irremediablemente corrupta y merecían el exterminio; pero la historia cuenta varios casos visibles en los que Dios castigó a las naciones corruptas y responsables por la instrumentalidad de otra gente tan malas como ellas. No fue por el bien de los israelitas, sino por su bien, por la promesa llevada a cabo a sus que tienen piedad ancestros, y cumpliendo de los propósitos altos y terminados del bien para el planeta, que Dios se encontraba próximo de proporcionarles una concesión de Canaán. .
7. Recuerda y no olvides cómo provocaste al Señor – Para desalojar de sus mentes Frente algún iniciativa presuntuosa de su propia justicia, Moisés ensaya sus actos de desobediencia y rebelión realizados con tanta continuidad, y en situaciones de la más terrible e increíble solemnidad, que habían perdido todas las metas del favor de Dios. La franqueza y la audacia con que dio, y la sumisión tolerante con la que la multitud soportó, su recitación de cargos tan desacreditables para su carácter nacional, comunmente fué recurrido como una de las muchas evidencias de la realidad de esta historia.
8. También en Horeb – más bien, “inclusive en Horeb”, donde podría haberse esperado que hubieran actuado de otra forma.
12-29. Levántate, desciende rápidamente de aquí; por tu pueblo . . se han corrompido – Con el objetivo de humillarlos acertadamente, Moisés procede a particularizar varios de los casos más atroces de su infidelidad. Empieza con la impiedad del becerro de oro, una impiedad que, mientras su emancipación milagrosa de Egipto, las exhibiciones más increibles de la Divina Majestad que se exhibieron en el monte contiguo, y la última ratificación del pacto por el cual se comprometieron Accionar como el pueblo de Dios, eran frescos en la memoria, indicaban un nivel de inconstancia o degradación increíble.
17. Tomé ámbas mesas,. . . y los rompió frente tus ojos – no en el calor de la pasión intemperante, sino en la indignación justa, del celo por vindicar el inmaculado honor de Dios, y por la sugerencia de Su Espíritu de intimar que el pacto había sido roto, y la gente excluidas del favor divino.
18. Me caí frente el Señor – La reacción inmediata y dolorosa que esta escena de juerga pagana causó en la cabeza del líder piadoso y patriótico puede ser soñado más fácilmente que descrito. Los errores enormes y públicos requieren temporadas de humillación extraordinaria, y en su profunda aflicción por la terrible apostasía, se ve haber tenido un ayuno milagroso como antes.
20. El Señor se encontraba muy enojado con Aaron por haberlo destruido – Al posibilitarse ser abrumado por la marea habitual clamor, Aaron se convirtió en partícipe de la culpa de la idolatría y habría sufrido la pena de su cumplimiento pecaminoso, si no hubiera prevalecido la seria intercesión de Moisés en su nombre.
21. Arrojé el polvo en el arroyo que descendió del monte , oséa, “la roca herida” (El Leja) que era seguramente contiguo al Sinaí o parte de él. Extraña vez se tiene presente que, a pesar de que los israelitas han recibido agua de esta roca cuando estaban estacionados en Rephidim (Wady Feiran), no hay nada en la narración de las Escrituras que logre llevarnos a sospechar que la roca se encontraba en el vecindario inmediato. de ese lugar El agua en esta roca herida fue seguramente el arroyo que descendió del monte. El agua probablemente halla fluido a una distancia de muchas millas de la roca, como lo hacen los torrentes de invierno a través de los wadies de Arabia-Petraa ( Salmos 78:15 Salmos 78:16 ) . Y la roca probablemente halla sido golpeada a tal altura, y en un punto que tiene una relación con los valles del Sinaítico, como para proveer así abastecimientos de agua a los israelitas mientras se esta viajando desde Horeb por el sendero del monte Seir y Cades -barnea ( Deuteronomio 1: 1 Deuteronomio 1: 2 ). Sobre esta suposición, quizás se arroja novedosa luz sobre el lenguaje figurado del apóstol, cuando habla de “la roca que sigue” a los israelitas ( 1 Corintios 10: 4 ) [WILSON, Tierra de La Biblia ].
25. Así caí frente el Señor 40 días y 40 noches, como yo cayó al inicio – Después de la enumeración de numerosos actos de rebelión, mencionó el brote en Kadesh-barnea, que, en una lectura superficial de este versículo, se ve haber llevado a Moisés a un tercero y prolongado época de humillación. Pero en una comparación de este pasaje con Números 14: 5 , el tema y el lenguaje de esta oración detallan que solo el segundo acto de intercesión ( Deuteronomio 9:18 ) se detalla en este momento en Datos más terminados.