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efesios 6 10 20
Debemos tomar en consideración que es una armadura, no múltiples, y debemos llevarla en su totalidad en la medida en que nos equipa para efectuar frente a todos y cada uno de los asaltos del demonio. No nos ponemos el día de hoy el casco y mañana el escudo. Los soldados se organizan con toda la armadura en el instante en que van a la guerra y nosotros, como buenos soldados de Jesús debemos llevar a cabo lo mismo.
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Vida Eterna:
No se la desea silenciar, no se la desea guardar. Pónganse como zapato la paz que procede de la Buena Novedad a fin de estar completamente preparados. Congregarnos, orar, cantar, leer la biblia no nos hace cristianos, mientras que no nos hayamos ceñido con la realidad.
- El es nuestra salvación, y la Palabra de Dios.
- Y en los episodios 3 al 6 nos charla de la parte práctica que implica esa situación.
Bunyan mostró sabiduría al mandar a sus Peregrinos a la armería inmediatamente después de cenar. Tan veloz como entramos en comunión con Dios, nos es necesario ser pertrechados para la lucha de la fe. 23 Paz sea a los hermanos, y amor con fe, de Dios Padre y del Señor Jesucristo. Él podía estar preso, pero el evangelio estaba libre, da igual a dónde estuviese ni sus ocasiones.
Dios nos ordena vestirnos y no con cualquier cosa sino con lo necesario para la contienda. Fuimos proveídos de la ropa necesaria para estar pertrechados. Al cerrar que debemos ponernos la armadura, va a nombrar cada una de las partes, pero lo esencial para las victorias es tener todas y cada una esas partes puestas siempre. No es bastante con entre las partes, sino todas ellas. Aparte de esto añade, vestíos, ponte de una vez y para toda la existencia la armadura de Dios. Tenemos el poder del Todopoderoso junto a nosotros, con la fuerza que nos ofrece pero además con la armadura que Dios nos da.
No ha de estar triste ni afligido por la resistencia que recibe, como unos pies descalzos en vidrio y piedras afiladas. Él debe tener calzados sus pies espirituales. Al final, utilicen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, es decir, la Palabra de Dios. Ya que no nos estamos enfrentando a fuerzas humanas, sino más bien a los poderes y autoridades que dirigen este mundo y sus fuerzas oscuras, los espíritus y fuerzas malas de todo el planeta de arriba. Ser incesante en la oración, hace que aumente el tesoro en el cielo, como también hace que la paciencia y la mansedumbre florezcan en tu vida de forma natural, gracias a la auténtica presencia de Dios.
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en todo, tomando el escudo de la fe con el que podréis apagar todos y cada uno de los dardos encendidos del malvado. Tenemos que emplear las doctrinas que Pablo nos ha enseñado en este libro. Debemos llevar sus enseñanzas a la práctica. En los tres primeros episodios, Pablo nos comunica que somos hijas de Dios, y desde el cuarto capítulo de ahora en adelante, nos comunica de qué forma debemos comportarnos. Rezar por todos los Beatos – Tratándose de la oración, Jesús nos dió la oración modelo.
#tranquilacorazon Hoy cambie mi vestido por el uniforme de guerrera. #MujeresDeInfluencia ¡Si tratásemos de ganar guerras fundamentadas en nuestras propias fuerzas, con armas carnales, ya estaríamos derrotadas!
Efesios 6, diez-20 #primeralectura #Hilo pic.twitter.com/YihLpbEVKq— Elena De Tellitu (@Edetellitu) October 29, 2020
Nuestro enfrentamiento no tiene tanto rincón contra seres fatales como contra los inmortales poderes del mal que rigen en sus vidas, y que vienen a nosotros con fachada de «las artimañas del demonio». Estas artimañas son muy variadas, y se amoldan para ajustarse a las diferentes tendencias de la temporada o del sujeto. Debemos proteger nuestras cabezas, y las protegemos con la salvación que nos fué dada.
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, y la espada del Espíritu que es la palabra de Dios. 11Revestíos con toda la armadura de Dios a fin de que podáis estar firmes contra las trampas del demonio. 11Vestíos de toda la armadura de Dios, a fin de que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Los huestes espirituales de maldad en las ubicaciones celestes se alegran en el momento en que tienen la posibilidad de herir a los creyentes. Pero el yelmo de salvación es fuerte y fuerte a todos los asaltos que surgen del aire. Es de esta forma como suena lo que dice Satanás cuando un alma va a llevar a cabo una obra de fe.
Habiéndonos dado un contexto, nos lleva a entender mucho más a fondo la realidad en la que vivimos. Como lo decía en el mensaje previo, ¡Nos encontramos en Guerra! , mis hermanos, somos propósito militar y nuestra guerra no es en el reino físico sino más bien en el reino espiritual. Nuestra riña es contra aquellas cosas que están sometidas bajo los pies de Cristo, nuestra cabeza.
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Esta es la victoria que vence al planeta, nuestra fe. «Para que podáis estar firmes.» Habiendo sido justificados libremente por su felicidad, y admitidos en el Amado, conseguimos una bendita firmeza, de la que el enorme enemigo de las almas está siempre intentando de expulsarnos. La estratagema del demonio es interponerse entre nuestras almas y Dios para que la fuente de nuestro suministro espiritual quede cortado.