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de que charla jeremias 4
El único amigo que va a ser un cobijo en la vergüenza y la ruina que prosiguen al pecado, no es el compañero en la culpa, sino más bien el Dios contra quien se comete el pecado. II LA COMODIDAD DE LA MALDAD PUEDE ESTAR ASOCIADA A LA SABIDURÍA MALDIRECTADA. El “estúpido” en las cosas espirituales puede ser un hombre sabio mundano e inteligente en la ejecución de la maldad. Irónico como es el lenguaje del artículo, de forma recurrente puede conseguir una app así. Los hombres de negocios taimados tienen la posibilidad de ser espiritualmente ciegos. Los hombres que están lúcidos y deseoso por intranquilidades materiales se vuelven desanimados y apáticos cuando tocan intereses más superiores.
Las casas de Jerusalén, y las casas de los reyes de Judá, van a ser como el lugar de Tofet, repulsivas, por todas y cada una de las casas sobre cuyos tejados ofrecieron incienso a todo el ejército del cielo, y vertieron libaciones a dioses extraños. Y les haré comer la carne de sus hijos y la carne de sus hijas, y cada uno va a comer la carne de su amigo, en el asedio y en el apuro con que los estrecharán sus contrincantes y los que intentan sus vidas. Pues me dejaron, y enajenaron este rincón, y ofrecieron en él incienso a dioses extraños, los cuales no habían habitual ellos, ni sus progenitores, ni los reyes de Judá; y llenaron este sitio de sangre de inocentes. y vas a salir al valle del hijo de Hinom, que está a la entrada de la puerta oriental, y proclamarás allí las palabras que yo te charlaré. para poner su tierra en desolación, objeto de broma perpetua; todo el que que pasare por ella se asombrará, y meneará la cabeza.
Jeremías 5
En el desarrollo, Jeremías combató con ciertas preguntas más difíciles de la vida, problemas que nosotros también tenemos la posibilidad de enfrentar. Leer Jeremías nos da la oportunidad de hallar conocimiento y visión sobre lo que significa ser útil a Dios aún en tiempos difíciles. Nos asiste a descubrir sabiduría práctica para cada día, al tiempo que intentamos continuar a Dios en la mitad de la oposición.
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Tenemos que ser humildes y, al mismo tiempo, ser capaces de admitir que nosotros no nos encontramos libres de cometer exactamente los mismos errores que cometió el pueblo de Dios anteriormente. Este texto nos habla de como los hombres tienen la posibilidad de caer en una falsa seguridad. Esta supuesta seguridad se fundamenta en lo que creen ser o en lo que tienen. Pero en el fondo todos ellos han errado al no fundamentar su éxito en el Señor.
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de que habla jeremias 4
Emplear en lo personal ciertas lecciones enseñadas. III. LAS ACCIONES DE DIOS SON A VECES ILUSIVAS PARA NOSOTROS. Había una medida de verdad en el imprudente grito del profeta. Sin embargo, su enunciado puede ser mal comprendido por nosotros. Se dice que Dios endurece el corazón en el instante en que su acción resulta en esta condición maligna por medio de la mala conducta de los hombres, y no en lo más mínimo por medio de su deseo de ocasionar ese mal. Por ende, podría decirse que Dios prácticamente engaña (aunque la expresión es falsa) en el instante en que su Palabra es tal que caemos en un fallo al escucharla. Según su apertura versos del libro registra las afirmaciones proféticas del sacerdote Jeremías hijo de Hilcías, «a quien vino la palabra de YHWH en los días del rey Josías» y después.
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IV. SU ENTRADA SOLA. Esta entrada es por comunión con Cristo en nuestra vida diaria. Veamos bastante sobre él en el momento en que se nos enseña en su evangelio y en las Escrituras generalmente, y en el momento en que observamos su semejanza reproducida en las vidas de los mucho más verdaderos de su pueblo. Que lo intentemos mucho en el ejercicio de la seguridad diaria, comprometiendo y encomiando todos nuestros intereses a su precaución.
- La sensibilidad intencional del temperamento profético y la visión mucho más aguda del vidente, son las ocasiones de una tristeza incomunicable, e inclusive, a veces, de una preocupación trascendente.
4 Circuncidaos a Jehová, y quitad el prepucio de tu corazón, varones de Judá y moradores de Jerusalén; no vaya a ser que mi furia salga como fuego, y se prenda y no haya quien la apague, por la maldad de vuestras proyectos. Era un tiempo en que se estudiaban toda la Biblia, todo el consejo de Dios, y lo aplicaba a toda la vida y a cada aspecto de la sociedad. Algunos piensan que Jeremías no fue al Éufrates, sino más bien a una aldea cercana. “El único objeto de esta crítica es ahorrarle al profeta los 2 supuestos viajes desde Jerusalén hasta el Éufrates”, responde un experto.
¿Cuál es la enorme necesidad de nuestros días sino más bien este, un ministerio que ha entrado en esta red social? ¿Uno penetrado con el cariño de Dios y el cariño de los hombres, para todos los que el favor de Dios es la vida, y los juicios de Dios, el infatigable mal del alma? ¿De qué manera hablarían, orarían y suplicarían tales hombres? Era el secreto del poder de San Pablo, y de los gigantes ministros de Cristo en todas las edades.
Tal es otro elemento de la bendición de esta comunión de los sufrimientos de Cristo. El testimonio día a día de la decadencia de toda amabilidad y el control más estable del pecado. , el corazón siempre y en todo momento y en todo momento embrutecido, el poderoso poder del pecado sobre ellos, que sus lágrimas más amargas fueron derramadas y su agonía considerablemente más profunda soportó. El mal y la angustia eran males sin duda, pero no eran nada comparados con la degradación moral, la maldad espiritual, que veía a su alrededor y que aumentaba cada día. Los hombres están llamados a “lavar sus corazones” de ellos y expulsarlos. En consecuencia, está exactamente dentro del poder de los hombres llevar a cabo esto.
Piense, por poner un ejemplo, en esos borrachos que se pusieron en deber a la abstinencia total, y pusieron sus pies hacia una vida considerablemente más viril y pura, solo para entender prontísimo que el apetito y el hábito no se dominan tan fácilmente. Por fin, tras varios fracasos, llega un mantenimiento permanente. Hay una riña, coronada con la Victoria, pues el alma, habiendo perdido su seguridad en sí, realmente se volvió hacia Dios. La salida al pecado es de Dios, y para él ha de ser el único retorno satisfactorio. I. OBSERVE CÓMO DIOS RECONOCE LA INESTABILIDAD DE LA GENTE APÓSTATA. No es sencillamente que él aprehende la inestabilidad en sus resoluciones hacia sí mismo. Su misma apostasía es en sí misma una cosa desequilibrado.