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La mas util Estrategia para Sadrac Mesac Y Abednego

sadrac mesac y abednego

Su fe pasó a través de la historia inspirando y apoyando a varios que creen en Dios. Para tener fe y obedecer a Dios en las notables pruebas, es requisito estar preparados al obedecer las pruebas considerablemente más pequeñas. Los retos de la vida en múltiples oportunidades escalan en intensidad y probables consecuencias. La resolución de Sadrac, Mesac y Abed-Nego de no contaminarse con la comida y la bebida del rey asemeja ser una prueba de obediencia que los preparó para ser leales en el momento en que la amenaza era mucho mayor.

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Tema 1: Sadrac, Mesac Y Abednego (apagaron Fuegos Vehementes) Domingo 5 De Mayo

Es esencial que nosotros seamos leales ahora, en preparación para las pruebas que podrán venir más adelante. Al presenciar la prodigiosa protección de Sadrac, Mesac y Abed-Nego, el rey los llamó para que salieran del horno e hizo un decreto para que nadie dijera “Blasfemia contra el Dios” que había salvado a Sadrac, Mesac y Abed-Nego (vv. 26, 29). En el final del programa de tres años, Daniel, Sadrac, Mesac y Abed-Nego tenían sus exámenes orales delante del Rey Nabucodonosor. De acuerdo con estas entrevistas, el rey los consideraría como los más refulgentes y capaces entre sus hombres sabios, y entraron a su servicio (vv. 18-20).

  • Los tres hombres se pusieron prodigiosamente parado y anduvieron en medio fuego sin padecer ningún daño.
  • Según estas entrevistas, el rey los consideraría como los mucho más brillantes y capaces entre todos sus hombres sabios, y entraron a su servicio (vv. 18-20).

El fuego no les había hecho daño ni les había quemado la ropa. 13 Entonces Nabucodonosor dijo con furia y con enojo que trajesen a Sadrac, Mesac y Abed-nego. Al momento fueron traídos estos hombres enfrente del rey. El contenido de este relato es muy semejante al del cap.

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Nabucodonosor, pensaba que absolutamente nadie podía escapar de “su poder”, su desconocimiento del Dios de estos tres jóvenes lo llevaba a meditar de una manera natural. La Biblia asegura que el hombre natural no siente las cosas que son del espíritu, por el hecho de que para él son disparidad, por el hecho de que las cosas espirituales tienen que discernirse espiritualmente. Era normal que Nabucodonosor creyese que estos jóvenes estaban locos, por el hecho de que no existía poder, considerablemente más allí que el de él, que pudiese asistirlos. Por ende, decreto que todo pueblo, nación o lengua que afirme blasfemia contra el Dios de Sadrac, Mesac y Abed-nego, sea descuartizado, y su casa transformada en estercolero; por cuanto no hay dios que consigua librar como este». Entonces Nabucodonosor se llenó de furia, cambió el aspecto de su rostro contra Sadrac, Mesac y Abed-nego y ordenó que el horno se calentara siete ocasiones mucho más de lo acostumbrado.

Estos tres hombres, Sadrac, Mesac y Abed-nego, cayeron atados dentro del horno de fuego ardiente. De este modo, estos hombres fueron atados con sus mantos, sus calzados, sus turbantes y sus vestidos, y fueron echados en el horno de fuego ardiente. Y ordenó a hombres muy robustos que tenía en su ejército, que ataran a Sadrac, Mesac y Abed-nego, para echarlos en el horno de fuego candente. Nuestro Dios, a quien servimos, puede librarnos del horno de fuego candente; y de tus manos, rey, nos librará.

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Entonces Nabucodonosor dijo con furia y con enojo que trajeran a Sadrac, Mesac y Abed-nego. Por ello, en aquel tiempo ciertos hombres caldeos vinieron y acusaron maliciosamente a los judíos. Él muda los tiempos y las edades, quita reyes y pone reyes; da la sabiduría a los sabios y la ciencia a los entendidos. y Daniel entró y pidió al rey que le concediera tiempo, que él daría al rey la interpretación. Entonces Daniel charló sabia y prudentemente a Arioc, capitán de la almacena del rey, que había salido para matar a los sabios de Babilonia. Por ello el rey, con ira y con enorme enojo, mandó que mataran a todos los sabios de Babilonia.

Entonces un ángel asiste y hace que el interior del horno se vuelva fresco y interesante, y los tres jóvenes cantan un himno de alabanza a su Dios por salvarles, la “Canción de los Tres jóvenes”, que se enseña mucho más adelante. El horno candente es una historia del Libro de Daniel (capítulo 3) en el Tanakh . Como la orden del rey era apremiante y el horno había sido calentado excesivamente, la llama del fuego mató a los que habían alzado a Sadrac, Mesac y Abed-nego. El rey Nabucodonosor hizo una estatua de oro cuya altura era de sesenta codos y su anchura de seis codos; la levantó en el chato de Dura, en la provincia de Babilonia.

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La fe real significa obedecer a Dios aun en medio de ocasiones difíciles. Como próximamente observaremos, esta prueba parcialmente pequeña de fe, echó las bases para las mucho más bien bien difíciles que próximamente vendrían. La letra de la obra de música electoacústica Gesang der Jünglinge del compositor Kalheinz Stockhausen está compuesta de los extractos bíblicos que forman la historia de los tres jóvenes en el horno.

El rey les dio una ocasión considerablemente más de postrarse frente a la estatua dorada o de lo contrario serían echados en el horno de fuego por desobedecer las órdenes y ordenes del rey. Los tres tipos probaron un increíble valor, reverencia y respeto hacia Jehová que le afirmaron al rey que ellos jamás se postrarían ante otros dioses y que el Dios en quien ellos confían podía liberarlos del horno y aun del enojo del rey. El rey enfurecido mandó calentar siete veces considerablemente más el horno de fuego para lanzar a los jóvenes, los guardias que llevaron a los jóvenes hasta el horno se incineraron gracias a las considerables flamas y el calor del horno, pero los tres muchachos no se quemaron. Una vez en el horno de fuego el rey se percató que había 4 hombres en el horno.

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