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historias biblicas cristianas Josué 13

historias biblicas cristianas Josué 13

CAPÍTULO 13

 

Joshua 13: 1-33 LÍMITES DE LA TIERRA AÚN NO CONQUISTADOS.

1. En este momento Joshua era viejo y afligido en años – seguramente tenía más de cien años; para la conquista y reconocimiento de la tierra ocupada unos siete años, la partición uno; y murió a la edad de ciento diez años ( Josué 24:29 ). La distribución, así como la conquista de la tierra, se incluyó en la misión de Joshua; y su avanzada edad proporcionó una razón particular para ingresar en el desempeño inmediato de ese deber; a entender, de conceder a Canaán entre las tribus de Israel, no solo las partes que ya triunfaron, sino también aquellas que aún no habían sido conquistadas.

2-6. Esta es la tierra que aún permanece , oséa, para ser conseguida. Esta sección forma un paréntesis, en el que el historiador nota resumidamente los distritos aún no publicados; a entender, primero, todo el país de los filisteos: un tramo ajustado que se prolonga a unas sesenta millas durante la costa mediterránea, y el de los Gesuritas al sur de la misma ( 1 Samuel 27: 8 ). Los dos incluían esa porción del país “desde Sihor, que está antes de Egipto”, un pequeño arroyo cerca de El-Arish, que en el este era el límite sur de Canaán, hasta Ekron, el más septentrional de los cinco primordiales señoríos o principados de Los filisteos.

3, 4. también los Avites: Desde [en] el sur – ámbas cláusulas están así conectadas en el [19459016 ] Septuaginta y muchas otras ediciones. Al ser expulsados ​​( Deuteronomio 2:23 ), se establecieron en el sur de Filistea. La segunda división del país no conquistado comprendía

4. toda la tierra de los cananeos y Mearah – (“la cueva”)
que está al costado de los sidonios –una región montañosa de la Alta Galilea, destacable por sus cuevas y su solidez.
a Aphek –ahora Afka; hacia el este, en el Líbano.
a las fronteras de los amorreos – una porción del territorio del noreste que había pertenecido a Og. El tercer distrito que permaneció insubordinado:

] 5. toda la tierra de los giblitas –Su capital era Gebal o Bylbos ( griego ), en el Mediterráneo, a 40 millas al norte de Sidón.
todo el Líbano, hacia la salida del sol – oséa, Anti-libanus; la cresta oriental, que tiene su terminación correcta en Hermon.
accediendo en Hamath –el valle de Baalbec.

6, 7. Todos los pobladores de la región montañosa desde el Líbano son “todos los sidonios y fenicios”.
los expulsaré – El cumplimiento de esta promesa fue condicional. En la situacion de que los israelitas demostraran ser infieles o desobedientes, no someterían a los distritos en este momento especificados; y, de hecho, los israelitas jamás los poseyeron a pesar de que los pobladores fueron sometidos al poder de David y Salomón.
solo divídelo por sorteo a los israelitas para una herencia – La sección entre paréntesis está clausurada, el historiador aquí retoma el tema primordial de este capítulo: la orden de Dios a Josué para llevar a cabo un asignación instantánea de la tierra. El método de distribución por sorteo fue, en todos los puntos, el más destacable que se ha podido haber adoptado, puesto que evitó todo fundamento de descontento, así como los cargos de conducta arbitraria o parcial de parte de los líderes; y su aviso en la vida de Moisés ( Números 33:54 ), como el sistema según el cual tienen que hacerse las asignaciones a cada tribu, tenía la intención de llevar a la gente al reconocimiento de Dios como el dueño de la tierra y que tiene todo el derecho a su disposición. Además, un llamamiento solemne al lote mostró que era el dictado no de la sabiduría humana, sino divina. No obstante, se usó solo para saber la parte del país donde se establecería una tribu: la extensión del establecimiento se decidiría según un inicio diferente ( Números 26:54 ). El control dominante de Dios se prueba de forma concluyente porque cada tribu recibió la posesión predicha por Jacob ( Génesis 49: 3-28 ) y por Moisés ( Deuteronomio 33: 6-25 ).

8. Con quién hebreo, “él”. El antecedente es evidentemente para Manasés, no obstante, no media tribu recién citada, sino la otra mitad; para el historiador, guiado, por así decirlo, por el sonido de la palabra, se rompe para detallar las posesiones más allá de Jordania ya asignadas a Rubén, Gad, y la mitad de Manasés también ve Deuteronomio 3: 8-17 [19459003 ]). Puede ser correspondiente comentar que fue sensato poner estos límites en el registro. En caso de algún malentendido o disputa que surja sobre los límites exactos de cada distrito o propiedad, siempre se puede apelar a este archivo autorizado, y hay que conseguir un conocimiento terminado y un sentido complacido de lo que habían recibido de Dios ( Salmos 16: 5 Salmos 16: 6 ).

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