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Ecuánime Artículo Muestra 5 problemas nuevos sobre Yo Soy El Buen Pastor

yo soy el buen pastor

En el Salmo 23 hay una sepa de toda duda, recelo, miedo y aprensión, pues David llegó a saber que el Buen Pastor es Jehová. En este relato podemos consultar de qué forma Jesús se nombra dos veces como “Yo Soy”, la primera, Yo Soy la Puerta y la segunda Yo Soy el Buen Pastor. Y yo les doy vida eterna y no perecerán para toda la vida, ni nadie las quitará de mi mano. Por eso me ama el Padre, por el hecho de que yo pongo mi vida, para volverla á tomar. Así que, el empleado, huye, pues es asalariado, y no tiene precaución de las ovejas. Todos y cada uno de los que antes de mí vinieron, ladrones son y robadores; mas no los oyeron las ovejas.

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43 Yo Soy El Buen Pastor

Los que no oyen su voz y no siguen al Pastor no están entre sus ovejas. Hay aparte de esto, otras ovejas que deben ser traídas (v. 16). Él está hablando de todos los que forman parte al Señor Jesucristo como su pastor. Si vamos a comprender la paz especial de Dios y la seguridad en su amabilidad debemos creerle. Nada de lo dispuesto en la Palabra de Dios puede agradar nuestras pretensiones, salvo que confiemos en él. Las ovejas de Cristo le “conocen” a Él (v. 14), pero lo más importante es dado que Cristo “conoce” a sus ovejas.

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Esa persona no había invertido nada en ellas, y no iba a arriesgarse por ellas. Juan diez nos comunica de qué manera los ladrones y los lobos vienen para eliminar a las ovejas. Estos versículos nos aseguran que si bien Satanás viene a hurtar, a matar, y a remover al pueblo de Dios (versículo 10), Jesús está allí para protegernos, querernos, y salvarlos de la destrucción, dándonos vida eterna.

De Qué Manera Nos Ama Jesús

Lúcida, espada, contra mi pastor, y contra el hombre compañero mío –afirma el SEÑOR de los ejércitos. Hiere al pastor y se dispersarán las ovejas, y volveré mi mano contra los pequeños. Y El se afirmará y pastoreará su rebaño con el poder del SEÑOR, con la majestad del nombre del SEÑOR su Dios.

  • Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas y las mías me conocen a mí, como me conoce el Padre y yo conozco a mi Padre y doy mi vida por las ovejas.
  • No obstante, ¿de qué forma es este conocimiento que hay en el seno de la Trinidad?

Para indicar el peligro, emplea la imagen del lobo que «el lobo se arroja sobre ellas y las desperdigada». 11 Yo soy el buen pastor, el buen pastor su historia da por las ovejas. Con esta figura el Señor Jesús nos revela algo muy profundo de sí.

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De esta manera ellas escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño y un solo pastor.” Yo soy el buen pastor, pues conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí, tal como el Padre me conoce a mí y yo conozco al Padre. Tengo además de esto otras ovejas que no son de este redil y es requisito que las traiga asimismo a ellas; van a escuchar mi voz y habrá un solo rebaño y un solo pastor. , RVR60) – Procuremos la gloria de Cristo y dependamos de su gracia para ser fieles en el ministerio. Y qué responsabilidad tan seria, “pastorear el rebaño de Dios”. Proseguirán hasta que entren en la gloria eterna.Entonces debemos ser semejantes a Cristo para el rebaño.

Y tienes 2 opciones, están esos que escuchan su voz, y esos que no. En este momento hemos visto la semana anterior que Jesús es la puerta de las ovejas, y nos invita a entrar por esa puerta. Si Jesús ofreciera su propia vida, pero no pudiese tomarla nuevamente, sería únicamente un mártir, no un salvador. El viernes santurrón sería un funeral, no una celebración.

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Jesús no vino para ser simplemente el cuidador contratado, sino para ser aquel (el único), que era y que es, completamente puesto en compromiso con nosotros — hasta Su muerte y resurrección. Jesús es el buen pastor que pone Su historia física por usted y por mí. Diferenciándose de un cuidador contratado, el que puede huír en un instante de riesgo, el rebaño le pertenecía al pastor que se quedaba y las defendía. Él tenía una auténtica preocupación y afecto hacia lo que le pertenecía. En el capítulo diez, Jesús ilustra de qué forma el pastor protege de su rebaño, protegiéndolo del tiempo, los ladrones, y los animales de presa.

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Su preocupación no son las ovejas sino él mismo. Y ese hombre escapa por el hecho de que, siendo empleado, no le importan las ovejas. 13Así que, el asalariado, huye, por dado que es empleado, y no posee precaución de las ovejas.

“Yo soy la puerta de las ovejas y yo soy el buen Pastor”. Los líderes deseaba destruirlo, no se encontraba apasionados en él, en su salud, no se gozaron por su sanidad, ni se disfrutaron con la confesión de sus labios. Sucios, cortos de vista, testarudos, necesitados, dependientes de un pastor. , implicaba recorrer largos caminos bajo el inflexible sol de Israel para asesorar a los rebaños a las montañas donde había algo de hierva y pozos de agua. Si lo tenemos en cuenta detenidamente, la obra del lobo congenia con la actitud de empleado, ya que a ambos les interesa solo su beneficio, su satisfacción, su ganancia y no la de las ovejas.

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