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Lo que los tecnicos no están hablando sobre El Sabio Ve El Mal Y Se Separa y de qué forma le perjudica

el sabio ve el mal y se aparta

Espinos y lazos hay en el sendero de los desalmados, El que almacena su alma se divide de ellos. En las huellas de la humildad y del miedo de YHVH, Andan riqueza, honor y vida. Comparte tarjetas diarias gratis con mensajes para cada fecha y ocasión particular de manera fácil en tus comunidades y whatsapp, expresa pensamientos y sentimientos a través de imágenes con oraciones que diseñamos para cada instante de tu vida.

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19 Los pésimos se doblegarán ante los buenos, y los despiadados, a las puertas del justo. 18 La herencia de los incautos es la necedad, la corona de los reservados es la ciencia. 17 El iracundo comete insesateces, el hombre reflexivo sabe soportar. 15 El incauto cree todo lo que le dicen, pero el sensato mira sus pasos.

El Sabio Ve El Riesgo Y Se Separa

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Dios pone a prueba a los hombres, tratándose con frecuencia de la fe de ellos. Dios «tentó» (es decir, «probó») a Abraham al mandarle que ofreciera a Isaac en holocausto, y la fe del patriarca salió robustecida [Gn 22.1; Heb 11.17] según la norma subrayada en 1Ped. Apártate de la presencia del hombre insensato — El testigo veraz libera las ánimas — La justicia engrandece a la nación. “Señor, tu Palabra me protege de caer en el mal, tus sabios concejos me dan paz y dirección para eludir que mis pasos vayan al mal. Propagando el mensaje de Jesucristo. Si alguna persona te está anunciando la Palabra De Dios, toma con responsabilidad y atención, ya que es una señal de pare, de que corres riesgo de muerte.

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El sobre aviso ve el mal y se esconde; Mas los sencillos pasan adelante y reciben el daño. El avisado ve el mal y se esconde; Mas los fáciles pasan y reciben el daño. El sensato ve el peligro y se oculta, los incautos se arriesgan y lo abonan. El sensato ve el riesgo y lo evita; el insensato continúa y recibe el daño.

el sabio ve el mal y se separa

El hombre precavido ve el mal y se esconde, los incautos prosiguen adelante y la abonan. El cuerdo ve el peligro y se esconde, pero el necio continúa y la paga. El prudente ve el peligro y se esconde, los tontos prosiguen adelante para su mal.

¶ El sobre aviso ve el mal, y se esconde; mas los simples pasan, y reciben el daño. El sensato ve el mal y se esconde, mas los sencillos prosiguen adelante y son castigados. Los haraganes están tan pertrechados para el trabajo como los demás hombres, pero, al negarse a trabajar, se hacen contrincantes de sí mismos, pues su pereza les transporta a pasar apetito y pobreza. Y si bien sus manos rehúsan trabajar, su corazón no cesa de codiciar riquezas, placeres, honores, etc. Múltiples que desean dinero suficiente para gastarlo en vicios, pero detestan el trabajo que se necesita para conseguirlo sinceramente, se hacen bandidos y, prefiriendo el ocio al trabajo, caen en manos de la justicia y abonan muy cara su pereza. En cambio, las personas costosas tienen la oportunidad de ver satisfechos sus lícitos deseos, aparte de la satisfacción de llevar a cabo bien a otros, ya que siempre y en todo momento y en todo instante están prestos a ofrecer, mientras que los perezosos solo están dispuestos a recibir.

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  • tras el fracaso se transformará la vida en una protesta incesante, en un lamento, en una carga.

Dios nos dió principios en las Sagradas Escrituras que al colocarlos en ejercita nos ayudarán a vivir una vida plena en Cristo. 23.16 Mas el hijo de la hermana de Pablo, oyendo charlar de la celada, fue y entró en la fortaleza, y dio aviso a Pablo. Bienaventurado el varón que aguanta la tentación; pues cuando haya resistido la prueba, va a recibir la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.

6 El insolente busca sabiduría y no la encuentra, pero la ciencia es bien simple para el inteligente. 14 1 La sabiduría edifica una casa, pero la necedad la destroza con sus propias manos. Pues YHVH defenderá su causa, Y quitará la vida a los que la quitan a otro. La necedad se pega al corazón del niño, La vara de la corrección se la apartará. El que quiere la pureza de corazón, El que tiene felicidad en sus labios, Tendrá como amigo al propio rey. Instruye al niño en el sendero que debe de proseguir, Aun en el instante en que sea viejo no se apartará de él.

el sabio ve el mal y se aparta

En el momento en que un sabio tiene disputa con un necio, este se enfurece o se ríe, y no hay sosiego. No seas sabio a tus ojos, teme al SEÑOR y apártate del mal. El que es astuto, ve el riesgo y se esconde; el que es ingenuo, sigue y es perjudicado. El prudente ve el riesgo y lo impide; el inexperto continúa y sufre las secuelas. El prudente se adelanta al peligro y toma cautelas.

14 El descarriado se sacia con los frutos de su conducta, y el hombre de bien con sus acciones. 13 Asimismo entre risas, padece el corazón, y al fin la alegría termina en pesar. 12 Hay caminos que asemejan rectos, pero al final son caminos de muerte. 11 La casa de los despiadados será destruida, pero la carpa de los rectos florecerá. diez El corazón conoce su propia amargura y ningún extraño se asocia a su alegría.

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